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24 abr 2011

Sobre la producción de los cuatro discursos de Lacan y la libertad


dEl complicado texto de Lacan[1], nos enfrenta de nuevo con profundizaciones acerca de los conceptos planteados por Freud y el Psicoanálisis, para este caso Lacan se concentra en el discurso, el sujeto, el saber y el objeto de deseo.

No planteo en este texto descifrar todos los conceptos que Lacan esconde en su explicación[2], por el contrario me propongo explorar dos de esos conceptos a favor de responder al cuestionamiento de la libertad. Que está relacionado con el modo en que se configuran los discursos planteados por el autor. Antes de empezar quisiera resaltar que aquí Lacan pareciera desestructurar un poco las teorías psicoanalíticas, ya que plantea que según la relación y situación del sujeto con la otredad resultaran varios tipos de relaciones y de discursos, es decir que ya no hay un único discurso sino la posibilidad de varios discursos, que se entienden como estructuras mas allá de las palabras.

En primer medida Lacan enuncia que el sujeto ($) cuando se ve enfrentado ante la problemática de enfrentarse ante otros significantes, crea un significante fachada que lo signifique (S1), En este proceso $ queda determinado por S1, que no es sino el discurso del amo, el cual condiciona a $ a favor de su sistema de intereses. Una vez que $ está determinado por S1, en relación con el significante del saber (S2), $ pierde el camino directo a su objeto de deseo (a), Es decir que en este proceso de alienación el sujeto ya no puede expresar su necesidad por a de manera explícita, sino que debe hacerlo de manera implícita. Se podría resumir burdamente esta complicada ecuación en las siguientes preguntas:

¿Podemos expresar de manera natural nuestro deseo sexual hacia lo materno o lo paterno sin ningún tipo de tapujos? ¿Necesitamos de un sistema de adoctrinamiento social que nos corrija dichas necesidades básicas a favor de mantener un sistema social preestablecido en contravención de dichas necesidades? ¿Perdemos de mira nuestros deseos más primitivos unas vez adquirimos dicho adoctrinamiento que se traduce en una inserción aceptable a la sociedad? Obviamente el problema no es tan fácil de resumir. Sin embargo mi punto está en que nuestras necesidades primitivas, esa necesidad de llenar nuestra hiancia es claramente redireccionada, en primera medida a través de la construcción, necesaria, que el sujeto hace de un signifícate que lo represente en lo social, es decir un niño (ya hay aquí un significante) construye una identidad social (educada, respetuosa, familiar, social y de ahí se puede saltar a; democrática, inteligente, civilizada, libre) que lo determina. Sin embargo en la construcción de esa identidad deja de lado sus necesidades primarias (pierde a) a favor de que el sistema social al cual pertenece se mantenga y continúe. ¿Es este el discurso del amo? En razón de nuestra democracia que garantiza nuestra libertad de pensamiento ¿Qué pasa si adjuramos de ella? ¿No es lo mismo que adjurar de la fe cristiana en el siglo XV? Si bien algunos de estos discursos son necesarios, otros, como el caso de la democracia, el libre comercio, la verdad científica, se han establecido como monopolios de verdad en razón de un sistema social y económico claro que muy poco tiene en cuenta al sujeto.

Ahora bien, el segundo concepto, el de plus de goza, que emparentado fuertemente con la plusvalía marxista, puede verse desde Lacan en razón de la libertad, ya que en el proceso anteriormente descrito $ pierde a, está perdida representa lo que para Marx son las cuatro horas de mas que trabaja el obrero a favor de la manutención gratuita del jefe. Por muy dogmatico-socialista que nos parezca la apreciación me temo que es verídica. La pregunta que abría que hacer es ¿Qué pasa con ese plus de goce? ¿Quién lo aprovecha? A diferencia de la plusvalía, el plus de goce no tiene claro su direccionamiento, aclarando que este plus, o está perdida no solo está en una única ocasión perdida sino que tiene su valor en la repetición (una y otra vez intentaremos, por vías no directas, alcanzar nuestro objeto a), ¿A favor de que está perdida, este plus?

Como he insistido en estos escritos; volvamos la mirada hacia el modelo de economía actual sustentado en el consumo y la publicidad. Si aceptamos esta humilde sugerencia veremos que gran parte del sostenimiento del comercio y el consumo esta apuntado y sostenido por deseos sexuales, de prestigio, de realización, de plenitud etc. en resumen de completitud, es decir de satisfacer ese vacío que llamamos hiancia. Sabemos también de antemano que dicha hiancia nunca será satisfecha, sin embargo nosotros ignoramos, intencional o “inconscientemente” esto y seguimos consumiendo para intentar estar completos (este tipo de repetición no se halla solo en el consumo, aunque es un buen ejemplo, sino que también será frecuente en las relaciones sociales sentimentales) Siguiendo a Lacan, según el modelo arriba propuesto, podremos decir que el sujeto en su construcción de un significante, que le acarreó perder el camino directo al objeto a, nunca lograra alcanzar dicho objeto, ya que el significante con el cual es se significo es el del saber, es decir es un significante impuesto por un amo. Que quiero decir para no enredarme mas: Que dicho amo es el sistema económico que nos rigüe, y que planea por pocos regir al mundo si es que ya no lo hace, dicho sistema de consumo plantea que la sociedad adoctrine a cada ser humano que a esta llegue en los “valores” primigenios necesarios para vivir en ella, dichos valores re-significan a ese ser, con al consecuencias ya expresadas, para que ese $ en el proceso cíclico de búsqueda-fracaso-búsqueda-fracaso alimente y sostenga el sistema. Lo que podríamos decir es que ese plus de goce es el que sostiene el sistema capitalista de consumo. Podría incluso decirse que si en otra época fue la culpa, el poder etc. hoy en día es el consumo que se postula como relleno de la hiancia, pero que no lo es, por que no le interesa serlo. ¿Qué libertad seria esa?

Insisto, los planteamientos de Lacan en el presente capitulo son mucho más complejos, sin embargo a mi parecer tienen su base en el discurso del amo que intentamos analizar y ejemplarizar líneas arribas, ya que las variantes de discurso están en relación de las alteraciones que se hagan en el algoritmo propuesto por el autor. Los modelos de discursos que plantea Lacan, si bien diferentes, guardad varias constantes; la re significación del $, el ejercicio del poder por parte de un agente (monopolio de verdad) y un sujeto subyugado ante un discurso impuesto que lo aleja de sus primitivas o verdaderas pretensiones. En conclusión; cual quiera que sea la variante del algoritmo este siempre dará como resultado la sujeción del sujeto a favor de unos intereses específicos.

[1] Lacan, J. Libro 17, El Reverso del Psicoanálisis, Cap. I; Producción de los cuatro discursos. Editorial Paidos. Buenos Aires. 2006. pp.9-25.

[2] La explicación de Lacan en este capítulo es como el sujeto se relaciona con su significante exterior, el significante del saber y su objeto de deseo, estos cuatro elementos son situados por Lacan en cuatro espacios diferentes según un algoritmo, en las posiciones (Agente, verdad, otro y producción) y sus relaciones a medida que los elementos se desplazan a la inversa de las manecillas del reloj, van produciendo cuatro algoritmos que representan cada uno de los cuatro discursos: El del amo, el del universitario, el de la histeria y el del psicoanalista.

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